sábado, 22 de abril de 2017

Cosas que nunca cambian.


Por suerte o por desgracia, hay cosas que nunca cambian. No importa cuánto nos esforcemos en intentar cambiarlas. No importa que hayan perdido el sentido que tenían. No importa que sean cosas que antes quizás sí, pero que ahora ya no importan nada. Nada de eso importa. Porque lo cierto es que cuanto más queramos cambiarlas, más permanecerán tal y como están. Y lo más curioso es que en el fondo, y aunque nos cueste admitirlo, lo que en realidad queremos es que no cambien jamás.

Cosas de la vida. 

K.