domingo, 29 de abril de 2018

Dejarse llevar


Y de repente el cielo te resulta más azul y el sol brilla con más intensidad. Las nubes se deslizan con más ligereza y la brisa de primavera te parece magia. De repente no sirve cualquier canción, ni cualquier poema es suficiente para saciar estas ganas de soñar. Porque algo parece haber cambiado, aunque no recuerdes ya ni cómo ni cuándo sucedió. Solo sabes que ahora hay algo diferente, algo especial. Y te da miedo, porque así como no sabes de dónde salió tampoco sabes cómo terminará, ni si terminará como tú quieres. Pero te dejas llevar, porque al fin y al cabo en eso consiste vivir. En acierto y error, en cara y cruz, en cal y arena. Dejémonos llevar, que ya pensaremos en lo que haremos después. Disfrutemos el momento. Ya pensaremos qué hacemos si fracasamos. Ya pensaremos qué hacemos si triunfamos. Hasta entonces... soñemos un poco, que me han dicho que es gratis.
K.