viernes, 1 de octubre de 2010

Finales

Hay veces en las que pareciera que el mundo gira pero nosotros no giramos a su vera. Todo parece salir mal, las ilusiones desaparecen, los sueños se rompen y las fuerzas se desvanecen hasta convertirse en cenizas. Al borde del abismo, para ser más breves.

Es entonces cuando nos preguntamos por qué demonios la vida no nos trata como a otros tantos que sí saben sonreir, disfrutar, reír, sentir... o que al menos, aparentan a la perfección eso de vivir bien. Y nos preguntamos también si algún día nuestras almas errantes encontrarán por fin ese consuelo perdido. Pues bien, basándonos en la máxima de que absolutamente todo en esta vida tiene un final, diremos del mismo modo que las etapas oscuras y vacías encontrarán, con toda seguridad, el fin de su trayectoria en algún momento del transcurrir del tiempo. Nada es eterno y mucho menos el sufrimiento, pues es una de esas sensaciones que, aunque resulte muy complicado de controlar, depende única y exclusivamente del ser humano.

Así que si eres de esas personas que no encuentran su camino, que han perdido su estrella guía o que creen que no existe el final del túnel, recuerda: después de la tormenta siempre llega la calma.